60. Secuestro

Me avalanze hacia él pensando que el quería pelear conmigo, pero no era asi. Metal sonic me esquivo, me di cuenta enseguida de su real objetivo...



Amy, ten cuidado – grite

¿Qué?...- dijo mirando a todos lados y dando unos pasos hacia atrás



Mire hacia atrás tratando de ver a metal sonic pero este se habia escondido, de un momento a otro apareció tras Amy tomandola en brazos y llevándosela. Amy dio un grito ensordecedor. Yo intentaba atrapar a metal sonic pero el tenia una ventaja, él tenia la capacidad de volar, por lo que no pude cogerle, luego de unos segundos desapareció junto con Amy.


Me di unas vueltas en los alrededores y no encontré nada, encontrar a Amy para ayudarla seria difícil, en eso me encontré el zapato de Amy, se le debió haber caído cuando metal sonic se la llevo. Cogi el zapato y lo guarde.


Tenia dos opciones... ir a buscar a Amy para salvarla de una vez o volver a la aldea y pedirle ayuda a Sally y a los demás…Lo pensé y opte por ir solo, después de todo soy el único que conoce a Amy.


Comenze a correr en la dirección en la que perdi de vista a metal sonic, de la nada unos pequeños robots en forma de animales empezaron a dispararme. Los destrui y al acerlo unos pajaros, conocidos como “Flickies” empezaron a salir de los escombros de los robots destruidos. Yo extrañado, comprendi que Eggman usaba la energía de los flickies para que los robots funcionaran. Fui a buscar a Eggman a Robotropolis, pero me extrañe al ver que hay no estaba, debía de buscar en otro lado…


---Mientras en Stardust Speedway (autopista de polvo estelar)---


Metal Sonic llega a la base donde fue creado por Eggman, este le recibe con una sonrisa y una carcajada al ver que traia a la eriza en sus brazos…


Buen trabajo Metal sonic – dijo Eggman

Como usted dijo señor – respondió el erizo de metal

¡Sueltame!- gritaba Amy

¡Calla niña! – le dijo eggman a Amy, esta dejo de gritar – dejala por allí – dijo señalándole al robot una parte de la habitación


El robot obedeció y llevo a la eriza a un rincón de la habitación y le amarro las manos para evitar su escape. Amy miraba a sus apresores con algo de miedo.